Partido contra los últimos de la liga que se complica desde el principio. El partido daba comienzo a las 16:00 cuándo por sorpresa para ambos equipos vemos que el árbitro no aparece, tras varias llamadas de la mesa le notifican que el árbitro está de camino, que mientras tanto arbitre uno de los dos entrenadores, nos ponemos de acuerdo y arbitra la segunda entrenadora del equipo contrario. Comienza el partido y la segunda entrenadora no sabe arbitrar y pide disculpas de antemano. El partido está lleno de infracciones que no son debidamente sancionadas, al acabar el primer cuarto llega el árbitro oficial. Menudo alivio, fue lo que pensamos, hasta momentos más tarde cuando da comienzo el segundo cuarto y comienza una escabechina, golpes empujones, faltas a diestro y siniestro, el árbitro ni se inmuta, no se digna a pitar ninguna, entiendo que tiene prisa porque acabará el encuentro ya que sino todo se retrasaría. Estuvo a punto de que los chavales se mataran entre ellos. Fue una lástima ver como un deporte tan grande del cual admiro y tengo tremenda pasión por el, se transformará en un ring de lucha libre para ir más rápido y que no le pisáramos el partido a los siguientes. A nosotros nos piden puntualidad, respeto, DNI físicos y nosotros a ellos que hagan su trabajo como deberían y tristemente no lo han hecho. Por dar un punto positivo, los jugadores de Aravaca aguantaron el tipo, se mantuvieron fuertes y no se achantaron por los golpes, siguieron empujando e hicieron un partido muy duro, estoy muy contento con su actitud.